Fotógrafo profesional para bodas
Una vez me hablaron de que la fotografía de bodas se terminaba por los nuevos celulares inteligentes.
La mayoría de la gente estaba convencida que todos podían ser fotógrafos profesionales y cubrir eventos con su smartphone.
Pronto muchos papás dejaron de llamar s sus fotógrafos y encargaron las fotos a un familiar en los cumpleaños.
También algunos comenzaron a pensar en montar en las mesas varias cámaras descartables para que los propios invitados realicen las fotos de casamientos.
La verdad que fue una gran equivocación para todos los que quisieron ahorrarse en los costos de la fotografía.
No tenían idea lo complicado de estar en el momento justo. El captar una sonrisa, una lágrima, un momento.
Además de las cuestiones técnicas. Muchos no tenían noción de encuadre, o si lo tenían poco lo aplicaban.
Más allá de todo. El fotógrafo profesional tiene en su mente una basta experiencia teórica y práctica.
Conocí a mi fotógrafo cuando decidí salir a buscar presupuesto de bodas. Y es que por más que esas ideas rondaban mi cabeza.
La verdad que intuía que podría convertirse en un problema. Quería un registro tradicional.
Con un seguimiento y una composición profesional. Por lo tanto, las ideas y los consejos que me daban en esa época fueron descartadas.
